Últimamente estamos bastante ruteros y como deciros…¡nos da la vida!. Los días que vamos de ruta lo disfrutamos muchísimo, de eso se trata: de disfrutar de la naturaleza, desconectar, hacer algo de ejercicio, descubrir lugares, encontrarnos con la naturaleza…Ya os hemos contado los múltiples beneficios de andar en otras ocasiones.
Ahí vamos, comenzamos!
Decidimos hacer una ruta mítica en Picos de Europa: La ruta del Cares. Así que el grupo de habituales (la parte femenina con poca experiencia en rutas) madrugamos un domingo y nos dispusimos a disfrutar de un día espléndido. Bocata, bien de agua y buen humor los requisitos fundamentales para el equipo.
La ruta del Cares
La Ruta del Cares se abrió en la roca para el mantenimiento del canal de la central hidroeléctrica de Camarmeña – Poncebos. El canal fue construido entre el año 1916 y 1921. Y dada la orografía fue muy complejo y fallecieron varios obreros ( 11) en las obras.
El Parque Nacional de Picos de Europa es visitado por millones de personas anualmente, y esta ruta es una de las más transitadas.
Lo primero que quiero decir es que esta es una ruta sencilla y muy recomendable. Es llana…menos los 2 primeros kilómetros! Es la única dificultad del camino y bueno, con hacerlo cada uno a su ritmo y con cuidado ( muy pedregoso, llevad calzado adecuado) es suficiente.
Pasada esta subida el camino es totalmente llano y PRECIOSO! (Y recordar que todo lo que sube, tiene que bajar)
La cabra nos mira: Hey! cuidado con mis dominios
Aquí muy sonriente al principio de la subida….luego no sonreía tanto 😛
Y comienza el camino, entre la inmensidad, es un camino precioso. Unos 12 kilómetros en total hasta Caín donde paramos a comer el bocata y a refrescar nuestros pies con el agua clara y congelada del río Cares.
Lo describen mejor las fotos que mil palabras y nuestras caras de felicidad. Recomendable esta ruta, eso sí, si no os gusta toparos con muchos senderistas ( cuando digo muchos, digo en plan muchos muchos) pensarlo, que por aquí hay mucha gente, avisados quedáis.
Hola! somos nosotras!
Llegando a Caín
Comimos aquí, en Caín, el bocata sabia a gloria
Gozándola después de la primera subida
Garganta del Cares, impresionante desde cualquier punto de la ruta