Nos vamos

Pai, un pueblo hippie en mitad de las montañas de Tailandia

La entrada a nuestra cabaña en Pai

La entrada a nuestra cabaña en Pai

Pai se encuentra a unos 100 kilómetros de Chang Mai si vas por las 762 curvas en la famosa «carretera 1095». Vamos que el primer consejo que te vamos a dar es que si eres susceptible de marearte en coche, lleves biodramina :D.

Una pregunta que nos han hecho muchos viajeros es si merece la pena echar un par de días en Pai. Yo creo que no se puede responder con un si o un no, sino con un depende:

Si tu viaje a Tailandia es corto, 15 días o menos, yo particularmente no me desviaría a Pai. Esta regla tienen una excepción y es que os gusten los pueblos pequeños, entre montañas, con ambiente hippy… entonces tenéis que visitar Pai.

Si estas en un viaje largo, sin duda creo que merece la pena hacer una parada en ese pueblecito y disfrutar de unos días de descanso y de un buen desayuno (occidental) en Boomelicious Café , estoy escribiendo el post y estoy pensando en el pedazo desayuno que me supo a gloria, con huevos, pan y «café frappe». Delicioso.

En Pai nos alojamos en unas cabañas de bambú con mucho encanto al otro lado del río, hay muchos sitios donde elegir con muchos precios distintos. Estas cabañas costaban 200 bahts /noche (5€) con baño dentro de la cabaña y una pequeña terracita con dos tumbonas. Para llegar hasta allí teníamos que cruzar un puente de bambú y a mi aquello me hizo sufrir bastante. Soy un poco miedosa y sufro de vértigo, pero nadie dijo que fuese fácil la vida del mochilero.

Nuestra casita de bambú

Dormimos en aquellas cabañas 3 noches… dormir… de aquella manera! porque entre los bichos, los grillos, sapos, búhos y toda clase de fauna no identificada las noches eran una fiestas de sonidos selváticos y las mañanas una fiesta de «rascarse hasta las entrañas» porque nos acribillaron los mosquitos. Esto lo podemos considerar como un de las penurias del viaje, en Pai las picaduras nos lo hicieron pasar mal. Soportable, esta claro, pero fue exagerado. Así que una recomendación que hago es: quizá es preferible sacrificar «cabañas en entorno super bonito» por » hostales con paredes de hormigón». Las precauciones de dormir tapados, con antimosquitos, con mosquitera… allí no fueron suficientes.

Por lo demás, Pai es un lugar para hacer un alto en el camino maravilloso. Muy pequeñito. Hay algunos restaurantes y cafés maravillosos: otro que nos gusto, con platos vegetarianos riquísimos, Witching Well os lo recomendamos, me gusto mucho.

Y para cenar lo que recomiendo son los puestos que se ponen al atardecer de comida en la calle. Creo que uno de los mejores PadThais que tome en Tailandia ( y os aseguro que fueron muchos) sin duda lo tome en un puesto de una señora en Pai. De hecho repetí al día siguiente. Hay bastantes puestos de comida, incluidos postres dulces tipo «pancake de plátano». Recomiendo probarlo todo 😀

Y por supuesto, como durante todo el viaje: alquilamos una motocicleta y nos fuimos a dar un buen paseo por los alrededores.

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