Nos vamos de viaje a la antigua Persia, un viaje de 3 semanas por Irán con la mochila y la cámara al hombro. Os avisamos, tenemos muchos vídeos :D
Juan José Cacho
Follow _cachucoUna de las visitas que más puede sorprendernos en Camboya -y hay muchas cosas que sorprenden- son las casas flotantes (palafitos), poblados enteros que flotan en cuencas de ríos o lagos, en este caso, en Camboya está el Lago Tonlé Sap, uno de los más grandes de Asia que además tiene varias peculiaridades. En la época de lluvias puede aumentar su tamaño hasta 10 veces. Y ocurre otro fenómeno que sólo se repite en el Nilo -Egipto-, durante los monzones el río Sap y el Mekong invierten su corriente llenando el lago Tonlé Sap con agua de las crecidas del Mekong que en la época seca irá saliendo.
En Camboya se pueden ver muchos poblados flotantes, el más famoso es el Chong Kneas, cerca de Siem Reap -la ciudad cercana a Angkor- pero nosotros lo descartamos precisamente por eso y por la cantidad de turistas que van a diario. Algo menos conocido es Kompong Luang a pocos kilómetros de Pursat. Pero lo que nosotros quisimos fue ir a un poblado al que vayan pocos turistas, así la gente local está algo menos ‘maltratada’ y puedes ver realmente cómo viven.
Así pues, en el recorrido que hay entre Phnom Penh y Siem Reap -recorrido típico de casi todo el mundo-, nosotros hicimos dos paradas, la primera en Kampong Chhnang, un pueblecito a 90km de la capital y en el que éramos prácticamente los únicos extranjeros. Nos hay casi sitios para comer, no es un pueblo turístico, pero es un sitio perfecto para descansar y visitar los poblados flotantes de Chong Kos y Phoum Kandal.
Nos acercamos en un tuktuk hasta el muelle, nos cobraron 1$ desde el pueblo, se puede ir andando, pero son unos 3 o 4km y preferimos hacerlo andando a la vuelta de la visita. Una vez en el muelle -no se le puede llamar puerto- hay dos opciones, hacerlo en un barco turístico que te lleva por el Mekong (más caro y aburrido) o en un pequeño bote de madera tripulado por una chica con un palo (más divertido). Con este barco pequeño entras dentro del poblado, con el barco grande lo tienes que ver desde afuera.
Las visitas son de 1h (un poblado por 10$) o 2h (2 poblados por 15$). Nosotros hicimos la de una hora, ya que los dos poblados son similares.
La vuelta andando desde el muelle es un agradable paseo de una hora viendo casas, mercados, puestos y chiringuitos de lo más auténtico.
Lo primero que sorprende es que son simple cabañas de bambú en su mayoría con todos los adelantos actuales. No hay casa sin televisión, los ‘tenderetes’ de cables por encima del agua son de circo.
Ves otros barcos como el nuestro que se encargan de la venta de productos (alimentación, limpieza…) casa por casa. Hay casas flotantes que son bares, o talleres mecánicos, almacenes o tiendas.
Durante el paseo ves decenas de niños jugando, trabajando, viendo la tele, durmiendo… niños por todas partes, si te ven, acuden rápido a decir un «hello» y a saludarte con la mano, se parten de risa cuando les sueltas alguna palabra en khmer.
Pero también hay cosas más extrañas por ver, como animales de compañía, si, si, perros de 40kg en una casa flotante, o gallinas, aunque esto último lo puedo entender.
A continuación os dejo unas cuantas fotografías de la visita a las casas flotantes del poblado Chong Kos. Podéis ver más en la galería Casas flotantes en Chong Kos de nuestro canal de flickr.
Aldeas flotantesAsiaCamboyacasas flotantesChong KosDiarios del Sudeste Asiáticofloating housesKampong ChhnangSudeste AsiáticoTonlé Sap
Nos vamos de viaje a la antigua Persia, un viaje de 3 semanas por Irán con la mochila y la cámara al hombro. Os avisamos, tenemos muchos vídeos :D
Documental sobre mi primer maratón, el maratón de Palestina por el derecho del pueblo Palestino a la libertad de movimiento.
En nuestro canal de youtube puedes ver todos nuestros vídeos de viajes y rutas por la naturaleza. No te lo pierdas.
Pingback: El tren de bambú de Battambang, Camboya
Pingback: Itinerario para dos meses en Tailandia, Laos y Camboya
Pingback: Sudeste Asiático en 2 meses